FELICIDADES MI NIÑO GRANDE

Cumples 9 añazos ya. Es increíble como pasa el tiempo. Has pasado de ser un bebé rollizo y comilón a un chico grande, fuerte, apuesto e inteligente. Sigues siendo prudente pero ahora eres más activo y sociable. No puedo evitar recordarte de pequeño persiguiendo a las palomas en el Campo del Moro o tocando el piano en el Imaginarium de Príncipe Pío (ese mismo piano por el que perdiste totalmente el interés en cuanto llegó a casa). Ahora ya no cabes por la mini puerta de esa tienda. Un par de años más y ya serás tan alto como yo.

Como bien sabes porque lo hemos hablado muchas veces, tu nacimiento supuso el mío como madre y durante este tiempo he ido aprendiendo a serlo de tu mano y gracias a ti. Tú estás aprendiendo a vivir y yo a cuidaros a ti y a tu hermano. Sin duda a veces no lo hago todo lo bien que me gustaría, espero que aprecies los esfuerzos que hago por mejorar. Las cosas no fueron fáciles para nosotros al principio pero siento que poco a poco nos hemos ido acercando más el uno al otro. Ahora te conozco y entiendo mejor, admiro la pasión que pones en lo que haces, tu gran sentido de la responsabilidad y la curiosidad que te despierta todo.

Te miro mientras estás leyendo comics, jugando al fútbol o montando en bici y me siento orgullosa. Estas lleno de energía e ilusiones. Se te ve feliz y seguro de ti mismo y sé que serás capaz de hacer todo lo que te propongas. Te quiero mucho y te deseo lo mejor en este tu día y siempre. Espero que la vida te depare muchas cosas agradables porque te las mereces. 

¡FELIZ CUMPLEAÑOS ÁNGEL!