Como os conté en mi entrada anterior, he dejado de colechar con mi hijo pequeño. Este cambio en nuestras costumbres familiares está teniendo lugar justo cuando el sr. Estivill vuelve a la carga, esta vez a través de su página en facebook para, por medio de mentiras y teorías infundadas, vender su taller online para “enseñar” a los niños a dormir.
No sólo hace gala de no tener ni pajolera idea de fisiología del sueño, sino que además, en su tremenda osadía, se atreve a meterse en las relaciones intimas y privadas de las parejas que colechan con sus hijos. Habla de roles como si estuviera en los años ochenta o antes. Su página, sus libros, y su discurso en general desprenden caspa y huelen a naftalina.
Estivill dice: “Compartir cama con un niño noche sí, noche también altera la vida conyugal. Asimismo se produce una confusión de roles. El papel de madre anula el de esposa”.
Según su opinión, -porque no es más que eso, su retrógrada y machista opinión- yo supuestamente he estado faltando a mi rol y responsabilidades como esposa durante el tiempo que he colechado con mi hijo. No dice en qué consiste exactamente ese rol, ni que responsabilidades conlleva, pero todos sabemos a qué se refiere.
Mi respuesta a comentario tan estúpido como el suyo es una pregunta:
Es evidente que si el papel de madre anulase el de esposa durante tanto tiempo, no habría relación que lo aguantara. Le aseguro que eso no es así y el sofá-cama de mi salón es testigo de ello.
Por otro lado:
Sus sentencias demuestran lo alejado que está de la vida real, de la vida de familias reales, pues aunque le parezca mentira hay muchas parejas que logran “encargar hermanitos” durante el tiempo en que los mayores aún siguen colechando con ellos e incluso luego, duermen todos juntos y la mar de felices con el recién llegado.
Mi respuesta a comentario tan estúpido como el suyo es una pregunta:
¿Realmente cree que un matrimonio puede aguantar 7 años,
como por ejemplo habría sido mi caso,
de “alteración de la vida conyugal”?
Es evidente que si el papel de madre anulase el de esposa durante tanto tiempo, no habría relación que lo aguantara. Le aseguro que eso no es así y el sofá-cama de mi salón es testigo de ello.
Por otro lado:
¿Sabe que también existen los padres colechadores?
¿Están ellos igualmente anulando su papel de esposo por el de padre?
Sus sentencias demuestran lo alejado que está de la vida real, de la vida de familias reales, pues aunque le parezca mentira hay muchas parejas que logran “encargar hermanitos” durante el tiempo en que los mayores aún siguen colechando con ellos e incluso luego, duermen todos juntos y la mar de felices con el recién llegado.
Sr. Estivill, como le veo un poco perdido, tome nota:
- No hay un rol de esposa ni de madre definido ni obligatorios.
- Es perfectamente posible compatibilizar ambos aspectos.
- El ser humano pasa por distintas fases en su vida y somos perfectamente capaces de amoldarnos y no solo sobrevivir, sino disfrutar de ellas.
- Y sobre todo, algo que es obvio y es que la vida conyugal no se limita a lo que ocurre o no encima de un colchón, o entre las cuatro paredes del dormitorio "marital".
Poco a poco, usted ha ido reculando, se desdice, “donde dije digo, digo Diego”. Esto no le sirve de consuelo a todos los niños a los que sus padres, confiando en sus palabras, les aplicaron su método, adiestrándoles a conformarse con estar solos y gestionar en esa soledad sus propios y ancestrales miedos. Solo espero que hagan mella en usted todos los comentarios vertidos en las redes que le dicen que está equivocado, que aprenda algo de ellos y que deje de meter la pata como lo hace, fastidiando a los demás por el camino.
P.D.: Siéntese, sr. Estivill. Porque ¿sabe qué? Yo nunca, jamás, he dormido con mi esposo. Ni antes de convertirme en madre, colechadora o no, ni durante, ni tampoco voy a empezar a hacerlo ahora. Aunque no tengo que dar explicaciones a nadie de con quien duermo, le diré que es así porque con sus ronquidos soy incapaz de conciliar el sueño. ¿Cómo me deja eso como esposa desde su punto de vista? ¿Llamamos al Tribunal de la Santa Inquisición?
P.D.: Siéntese, sr. Estivill. Porque ¿sabe qué? Yo nunca, jamás, he dormido con mi esposo. Ni antes de convertirme en madre, colechadora o no, ni durante, ni tampoco voy a empezar a hacerlo ahora. Aunque no tengo que dar explicaciones a nadie de con quien duermo, le diré que es así porque con sus ronquidos soy incapaz de conciliar el sueño. ¿Cómo me deja eso como esposa desde su punto de vista? ¿Llamamos al Tribunal de la Santa Inquisición?
Unas palabras totalmente acertadas y es que cada día le tengo más tírria a este hombre y a sus "métodos" neandertales. Y es que sus palabras en mi casa, caen en saco roto, pero pienso en aquellos niños que sufrieron su método, los padres que le creyeron a pies juntillas, aquellos que presionados por la sociedad que creía a este hombre lo mejor de lo mejor sucumbieron y doy gracias de hacer lo que me sale de ahí y no hacer caso a la gente.
ResponderEliminarSaludos! :) :) :)
Sabes que pienso? Que muchos no sucumbieron presionados, si no que lo hicieron contentos y sin ningún tipo de remordimiento. Hay gente pa tó. Es lo que ocurre cuando nos alejamos de nuestros instintos. Besitos.
EliminarTu PD es una realidad en muuuuuchas casas (en la mía de momento no) asçi que no sabemos ni como hay niños a los que hacer sufrir con llantos "controlados"...
ResponderEliminarLo dicho, este señor es gilipollas
Jjajaaja, quizá sea muy listo pues vive de esto y no le va mal. Pero confío en que llegará un momento en que quedará totalmente desacreditado y se le acabará el chollo.
EliminarPero cuanto ha dado que hablar este hombre! Eso es lo que pretendía, hacerse un poco más famoso de lo que es. Y nosotras dándole bombo. Si es que no aprendemos. Besos!
ResponderEliminarPues es cierto, pero que hacemos? callar y otorgar? Yo creo que no es algo premeditado por su parte, el señor seguramente piensa esas cosas de verdad y está convencido de ellas. Cree que tiene la razón, que es lo lógico y si nadie se lo discute ahí queda plasmado como la única opción.
EliminarTodavía no soy mamá estoy buscando, pero si soy educadora infantil y de verdad que pienso que este hombre es anti natura, no estoy de acuerdo con nada de lo que dice ni sus metodos.Los niños criados con apego son mucho mas felices.
ResponderEliminarQue felicidad leerte! Hay muchas educadoras de la "vieja escuela" que están de acuerdo con sus postulados. Seguro que contigo los peques se sienten muy a gusto. Un beso.
EliminarEscritos como esté deberían publicarlos en todos los periódicos del país! Felicidades y gracias por escribirlo!!
ResponderEliminarMuchas gracias! Ojalá te oigan y me llamen para colaborar, jeje. Un beso.
Eliminar