miércoles, 23 de septiembre de 2015

¿LA MATERNIDAD NOS CAMBIA?

Lo bueno de la maternidad y la paternidad es que te permiten aprender mucho, de muchas cosas, desde embarazo, parto y lactancia, pasando por crianza, educación, ecología, alimentación, manualidades, etc. Si aprovechamos la oportunidad que nos brinda la paternidad podemos conocer un mundo muy diferente de aquel en el que creíamos vivir, podemos aprender sobre el ser humano, sobre psicología, sobre relaciones sociales, y desaprender muchas cosas que dábamos por ciertas y que para nosotros antes de convertirnos en padres eran incuestionables. 

A mí la maternidad me ha cambiado y decir esto no es un “tópico”, es la realidad y además es que debe ser así. Pretender que la maternidad no nos cambie, no cambie nuestras prioridades, nuestras rutinas y nuestra forma de hacer las cosas es como poco ingenuo. No digo que no pueda conseguirse, digo que es bastante improbable y de suceder, a mi parecer, también bastante triste pues indicaría que no estamos dando a esos nuevos seres un espacio real en nuestra vida.
  • La maternidad cambia las rutinas y los horarios: de comer, de acostarse, etc. 
  • Cambia los lugares a los que vamos, la gente a la que frecuentamos, las películas que vemos, etc. Nos vemos por ejemplo haciendo amistades con otros padres, sentados en un parque cosa que no hacíamos desde que éramos adolescentes y hacíamos botellón con los amigos.
  • Cambia nuestros temas de conversación que indefectiblemente terminan girando el 80% del tiempo en torno a los niños. 
  • Cambia la forma en que te relacionas con tu familia consanguínea o política para bien o para mal. Quizá ahora los veas más o quieras alejarte definitivamente de ellos.
  • Cambia tu forma de ver la política, de ver a tus vecinos, de ver a tus amigos con o sin hijos.
  • Cambian la percepción del tiempo y del futuro.
  • Cambian tus preocupaciones, los motivos de alegría y de tristeza, tus miedos y tus esperanzas. 

Cuando se es padre, todo o casi todo en tu vida gira en torno a tus hijos, ellos son tu prioridad y si bien no debemos perder de vista nuestro yo esencial, aquello que nos define como personas más allá de la paternidad, eso que somos hoy y ahora, no es igual a lo que éramos antes de llegar ellos. Nuestros hijos nos pueden enseñar mucho, al menos lo mismo que nosotros podemos enseñarles a ellos. La paternidad es una escuela que nos permite crecer a medida que van creciendo nuestros hijos. Si permitimos que la paternidad nos cambie seguro que lo hará para mejor.

En este enlace nos cuentan 15 cosas que cambian en nuestra vida cuando nace nuestro bebé.
¿Se te ocurre alguna más?

2 comentarios:

  1. Totalmente :-) En ocasiones puede cambiar hasta tu destino profesional, darte más valor o, incluso, enseñarte las cosas que realmente son importantes en esta vida.

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    1. Si, hay una Candy antes de ser mamá y otra muy diferente después. El cambio no ha sido repentino si no gradual, y yo creo que a mejor ;P

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